Los secuestrantes de ácidos biliares son una clase de medicamentos que se utilizan para reducir los niveles de colesterol en sangre. Estos medicamentos funcionan uniéndose a los ácidos biliares en el intestino, lo que impide su absorción y obliga al cuerpo a producir más ácidos biliares a partir del colesterol. Como resultado, se reduce la cantidad de colesterol en la sangre.
Los secuestrantes de ácidos biliares pertenecen al grupo ATC C10AC y se utilizan como modificadores de lípidos. En España, estos medicamentos son ampliamente utilizados para tratar la hipercolesterolemia, una condición en la que los niveles de colesterol en sangre son demasiado altos.
Según las estadísticas disponibles, el uso de secuestrantes de ácidos biliares ha aumentado significativamente en España durante los últimos años. En 2019, se vendieron más de 1 millón de unidades de estos medicamentos en el país. Esto representa un aumento del 15% con respecto al año anterior.
Los secuestrantes de ácidos biliares pueden ser administrados solos o junto con otros medicamentos para reducir el colesterol. Estos medicamentos no tienen efecto sobre los triglicéridos o sobre las lipoproteínas HDL (conocidas como "colesterol bueno").
Entre los efectos secundarios más comunes asociados con el uso de secuestrantes de ácidos biliares se incluyen problemas gastrointestinales como estreñimiento, diarrea y flatulencia. También pueden interferir con la absorción adecuada de ciertos nutrientes esenciales, como las vitaminas liposolubles.
Es importante destacar que los secuestrantes de ácidos biliares no son adecuados para todas las personas con hipercolesterolemia. Estos medicamentos pueden no ser efectivos en personas con niveles muy altos de colesterol LDL o en aquellos que tienen otros factores de riesgo cardiovascular significativos.
Además, los secuestrantes de ácidos biliares deben ser tomados con precaución por personas con enfermedad hepática o renal, ya que pueden afectar la función hepática y renal. También pueden interactuar con otros medicamentos, incluyendo algunos antibióticos y anticoagulantes.
En resumen, los secuestrantes de ácidos biliares son una clase importante de medicamentos utilizados para reducir el colesterol en sangre. Aunque son generalmente seguros y efectivos, es importante hablar con un médico antes de comenzar a tomar estos medicamentos para asegurarse de que sean apropiados para su situación individual.