La gonadotropina coriónica (GCH) es una hormona producida por la placenta durante el embarazo. Esta hormona se utiliza en medicina para tratar diversas afecciones, como la infertilidad y algunos tipos de cáncer.
En España, la GCH se encuentra en el grupo ATC G03GA01 y se comercializa bajo diferentes nombres comerciales, como Pregnyl o Ovitrelle. La GCH se administra por vía intramuscular o subcutánea y su dosis varía según la indicación terapéutica.
La principal indicación de la GCH es en el tratamiento de la infertilidad. En mujeres, se utiliza para inducir la ovulación en casos de anovulación o para aumentar las posibilidades de éxito en tratamientos de fecundación in vitro (FIV). En hombres, se utiliza para estimular los testículos a producir más testosterona y mejorar la calidad del esperma.
Además de su uso en infertilidad, también se utiliza en el tratamiento del cáncer testicular y del hipogonadismo hipogonadotrófico. En estos casos, se administra una dosis alta de GCH para estimular las células productoras de testosterona y mejorar los niveles hormonales.
Aunque la GCH es generalmente bien tolerada, puede causar efectos secundarios como dolor e inflamación en el lugar de inyección, náuseas y dolor abdominal. También existe un riesgo potencial de embarazo múltiple cuando se usa para inducir la ovulación.
En cuanto a su uso fuera del ámbito médico, es importante destacar que algunos atletas han utilizado ilegalmente esta hormona para mejorar su rendimiento deportivo. Sin embargo, su uso no está permitido y puede tener graves consecuencias para la salud.
En resumen, la gonadotropina coriónica es una hormona utilizada en medicina para tratar la infertilidad y algunos tipos de cáncer. Aunque es generalmente bien tolerada, puede causar efectos secundarios y debe ser administrada bajo supervisión médica. Su uso fuera del ámbito médico no está permitido y puede tener graves consecuencias para la salud.