El grupo ATC L02AB corresponde a los progestágenos utilizados en terapia endocrina. Estos compuestos son análogos sintéticos de la progesterona, una hormona sexual femenina producida por los ovarios y la placenta durante el embarazo.
Los progestágenos se utilizan en diversas indicaciones médicas, como anticonceptivos orales, terapia hormonal sustitutiva en mujeres menopáusicas y tratamiento de trastornos menstruales y endometriosis. También se emplean en combinación con estrógenos para prevenir el cáncer de endometrio en mujeres con útero intacto.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, el uso de progestágenos como anticonceptivos orales es muy frecuente entre las mujeres en edad fértil. En 2018 se dispensaron más de 7 millones de envases de estos medicamentos en las farmacias españolas.
Los progestágenos también son ampliamente utilizados como terapia hormonal sustitutiva (THS) en mujeres menopáusicas para aliviar los síntomas vasomotores (sofocos), mejorar la calidad del sueño y prevenir la osteoporosis. Según un estudio publicado por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), alrededor del 25% de las mujeres españolas que pasan por la menopausia reciben THS con progestágenos.
Además, los progestágenos pueden ser útiles para tratar trastornos menstruales como el síndrome premenstrual o el sangrado uterino disfuncional. En estos casos, se utilizan dosis más bajas que las empleadas en anticoncepción o THS.
En cuanto a los efectos adversos, los progestágenos pueden causar síntomas como náuseas, dolor de cabeza, cambios de humor y aumento de peso. También pueden aumentar el riesgo de tromboembolismo venoso (TEV) y cáncer de mama en mujeres que reciben THS con estrógenos.
Es importante destacar que la elección del progestágeno adecuado dependerá de la indicación terapéutica y las características individuales de cada paciente. Existen diferentes tipos de progestágenos con distintas propiedades farmacológicas y perfiles de seguridad.
En resumen, los progestágenos son un grupo importante de medicamentos utilizados en terapia endocrina para diversas indicaciones médicas. Su uso es muy frecuente en España, especialmente como anticonceptivos orales y terapia hormonal sustitutiva en mujeres menopáusicas. Es fundamental seguir las recomendaciones médicas para minimizar los riesgos asociados a su uso y obtener los máximos beneficios terapéuticos posibles.