El ranelato de estroncio es un medicamento utilizado para tratar la osteoporosis en mujeres posmenopáusicas y en hombres con alto riesgo de fracturas óseas. Pertenece al grupo ATC M05BX03 y actúa aumentando la densidad mineral ósea y reduciendo el riesgo de fracturas.
En España, se estima que alrededor del 30% de las mujeres mayores de 50 años sufren osteoporosis, una enfermedad que debilita los huesos y aumenta el riesgo de fracturas. Además, se estima que cada año se producen más de 25.000 fracturas de cadera en España, lo que supone un importante problema sanitario y económico.
El ranelato de estroncio ha demostrado ser eficaz en la prevención de fracturas vertebrales y no vertebrales en pacientes con osteoporosis. En un estudio realizado en España, se observó una reducción del 41% en el riesgo de fractura vertebral y del 36% en el riesgo de fractura no vertebral en pacientes tratados con ranelato de estroncio durante tres años.
El mecanismo por el cual el ranelato de estroncio actúa es complejo e implica varios efectos sobre los huesos. En primer lugar, estimula la formación ósea mediante la activación de los osteoblastos, células encargadas de sintetizar nuevo tejido óseo. Además, inhibe la resorción ósea mediante la reducción del número y actividad de los osteoclastos, células encargadas del mantenimiento del equilibrio entre formación y resorción ósea.
El ranelato de estroncio se administra por vía oral en forma de comprimidos y debe tomarse una vez al día. Es importante tomar el medicamento con el estómago vacío, al menos dos horas después de la última comida, para asegurar su absorción adecuada.
Como cualquier medicamento, el ranelato de estroncio puede tener efectos secundarios. Los más comunes son náuseas, diarrea y dolor abdominal. También se han descrito casos raros de reacciones alérgicas graves y problemas cardiovasculares como infarto de miocardio o accidente cerebrovascular.
Por esta razón, es importante que los pacientes informen a su médico si experimentan algún efecto secundario mientras toman ranelato de estroncio. Además, es recomendable realizar controles periódicos para evaluar la eficacia del tratamiento y detectar posibles complicaciones.
En resumen, el ranelato de estroncio es un medicamento eficaz en la prevención de fracturas óseas en pacientes con osteoporosis. Aunque puede tener efectos secundarios, su uso bajo supervisión médica adecuada puede mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes afectados por esta enfermedad.