El grupo ATC N05AH comprende los antipsicóticos que pertenecen a las familias de las diazepinas, oxazepinas y tiazepinas. Estos medicamentos se utilizan para tratar enfermedades mentales como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y otros trastornos psicóticos.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en 2018 se dispensaron más de 3 millones de envases de antipsicóticos. De estos, aproximadamente el 70% correspondían a medicamentos del grupo N05AH.
Los antipsicóticos actúan sobre los neurotransmisores del cerebro para reducir los síntomas psicóticos como alucinaciones, delirios y pensamientos desorganizados. También pueden ayudar a estabilizar el estado de ánimo y prevenir recaídas en pacientes con trastornos bipolares.
Sin embargo, estos medicamentos también pueden tener efectos secundarios graves como aumento de peso, diabetes mellitus tipo 2 y disfunción sexual. Por lo tanto, es importante que los pacientes sean supervisados por un profesional médico durante su tratamiento con antipsicóticos.
Entre las diazepinas más comunes se encuentran la clorpromazina y la levomepromazina. Estas drogas son conocidas por sus efectos sedantes y pueden ser útiles para controlar la agitación en pacientes con esquizofrenia o manía aguda.
Las oxazepinas incluyen medicamentos como la clozapina y la olanzapina. Estas drogas tienen menos efectos secundarios que las diazepinas pero aún así pueden causar somnolencia y aumento de peso. La clozapina es especialmente útil en pacientes que no han respondido a otros tratamientos antipsicóticos.
Por último, las tiazepinas incluyen medicamentos como la quetiapina y la ziprasidona. Estos medicamentos tienen menos efectos sedantes que las diazepinas y pueden ser útiles para tratar la depresión en pacientes con trastorno bipolar.
En conclusión, los antipsicóticos del grupo N05AH son una herramienta importante en el tratamiento de enfermedades mentales graves como la esquizofrenia y el trastorno bipolar. Sin embargo, su uso debe ser supervisado cuidadosamente por un profesional médico debido a los posibles efectos secundarios graves.