La Mizolastina es un medicamento antihistamínico de segunda generación que se utiliza para tratar los síntomas de la rinitis alérgica y la urticaria crónica. Pertenece al grupo ATC R06AX25.
La Mizolastina actúa bloqueando los receptores H1 de la histamina, lo que reduce la inflamación y el enrojecimiento de la piel, así como los síntomas asociados con las alergias, como el picor y el estornudo.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en 2019 se dispensaron un total de 2.460 envases de Mizolastina. El número de envases dispensados ha ido disminuyendo progresivamente desde 2015, cuando se dispensaron 3.928 envases.
La dosis recomendada para adultos es de 10 mg una vez al día antes o después de las comidas. En pacientes con insuficiencia renal o hepática grave, se recomienda reducir la dosis a la mitad.
La Mizolastina puede causar efectos secundarios como somnolencia, mareo y dolor abdominal. También puede interactuar con otros medicamentos como los antidepresivos tricíclicos y los inhibidores del citocromo P450.
Es importante tener en cuenta que no se recomienda el uso prolongado de Mizolastina debido a su potencial para causar arritmias cardíacas graves. Por lo tanto, debe ser utilizado bajo supervisión médica y sólo durante el tiempo necesario para controlar los síntomas.
En conclusión, la Mizolastina es un medicamento antihistamínico eficaz para tratar los síntomas de la rinitis alérgica y la urticaria crónica. Sin embargo, su uso debe ser supervisado por un médico debido a sus posibles efectos secundarios y su potencial para causar arritmias cardíacas graves.