El Sugammadex es un medicamento utilizado para revertir los efectos de los relajantes musculares no despolarizantes, como el rocuronio y el vecuronio, en pacientes sometidos a cirugía. Pertenece al grupo ATC V03AB35 y se administra por vía intravenosa.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en 2019 se dispensaron más de 38.000 unidades de Sugammadex en hospitales públicos y privados. Este medicamento ha demostrado ser eficaz y seguro en la reversión rápida del bloqueo neuromuscular inducido por los relajantes musculares no despolarizantes.
El mecanismo de acción del Sugammadex consiste en la formación de complejos con los relajantes musculares no despolarizantes, lo que reduce su concentración plasmática y permite la recuperación rápida de la función muscular. Además, tiene una alta selectividad por los relajantes musculares no despolarizantes y no afecta a otros receptores o sistemas fisiológicos.
La dosis recomendada varía según el tipo y la dosis del relajante muscular no despolarizante utilizado. En general, se recomienda una dosis inicial de 2 mg/kg para revertir el bloqueo neuromuscular moderado (post-tetánico) y una dosis inicial de 4 mg/kg para revertir el bloqueo neuromuscular profundo (post-tetánico). La administración debe realizarse bajo supervisión médica debido al riesgo potencial de reacciones alérgicas.
En cuanto a los efectos secundarios, el Sugammadex es generalmente bien tolerado. Los efectos adversos más comunes incluyen náuseas, vómitos, dolor de cabeza y mareo. En raras ocasiones, se han reportado reacciones alérgicas graves, como anafilaxia.
Es importante destacar que el Sugammadex no está indicado para la reversión de los relajantes musculares despolarizantes, como el succinilcolina. Además, su uso en pacientes con insuficiencia renal grave puede estar limitado debido a la eliminación renal del medicamento.
En resumen, el Sugammadex es un medicamento eficaz y seguro para la reversión rápida del bloqueo neuromuscular inducido por los relajantes musculares no despolarizantes en pacientes sometidos a cirugía. Su dosis y administración deben ser supervisadas por un médico debido al riesgo potencial de reacciones alérgicas. Aunque generalmente bien tolerado, pueden ocurrir efectos secundarios como náuseas o mareo.