El grupo ATC C10AA05 corresponde a la atorvastatina, un fármaco utilizado para reducir los niveles de colesterol en sangre y prevenir enfermedades cardiovasculares. La atorvastatina actúa inhibiendo la enzima HMG-CoA reductasa, lo que disminuye la síntesis de colesterol en el hígado.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en 2019 se dispensaron más de 13 millones de envases de medicamentos que contenían atorvastatina. Esto representa un aumento del 2% respecto al año anterior.
La atorvastatina se presenta en forma de comprimidos recubiertos con diferentes dosis (10 mg, 20 mg, 40 mg y 80 mg). La dosis recomendada dependerá del perfil lipídico del paciente y su riesgo cardiovascular. Por lo general, se inicia con una dosis baja e incrementa gradualmente hasta alcanzar el objetivo terapéutico.
La atorvastatina es bien tolerada por la mayoría de los pacientes. Sin embargo, como cualquier medicamento puede producir efectos secundarios. Los más comunes son dolor muscular y articular, dolor abdominal, náuseas y diarrea. En raras ocasiones puede producirse rabdomiólisis (destrucción muscular) o insuficiencia hepática.
Es importante destacar que la atorvastatina no debe ser utilizada durante el embarazo o la lactancia debido a su potencial teratógeno y excreción en leche materna. Además, está contraindicada en pacientes con enfermedad hepática activa o hipersensibilidad a la sustancia activa.
La atorvastatina puede interactuar con otros medicamentos, como los fibratos, los inhibidores de la proteasa del VIH o los antibióticos macrólidos. Por lo tanto, es importante informar al médico de todos los medicamentos que se estén tomando antes de iniciar el tratamiento con atorvastatina.
En resumen, la atorvastatina es un fármaco ampliamente utilizado en España para reducir los niveles de colesterol y prevenir enfermedades cardiovasculares. Aunque es bien tolerada por la mayoría de los pacientes, puede producir efectos secundarios y está contraindicada en ciertos casos. Es importante seguir las recomendaciones del médico y mantener una dieta saludable y actividad física regular para maximizar su eficacia.