El grupo ATC G03BB se refiere a los derivados del androstano, también conocidos como andrógenos. Estos compuestos son hormonas sexuales masculinas que se producen naturalmente en el cuerpo humano y juegan un papel importante en el desarrollo y mantenimiento de las características sexuales masculinas.
Los derivados del androstano se utilizan comúnmente en la terapia de reemplazo hormonal para tratar la deficiencia de testosterona en hombres adultos. También pueden ser prescritos para tratar ciertas condiciones médicas, como la hipogonadismo (una condición en la que los testículos no producen suficiente testosterona), la osteoporosis y el cáncer de mama metastásico.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, el uso de derivados del androstano ha aumentado significativamente en los últimos años. En 2018, se dispensaron más de 2 millones de envases de medicamentos que contienen esta sustancia activa.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el uso indebido o abuso de estos compuestos puede tener efectos secundarios graves. El abuso crónico puede causar daño hepático, enfermedad cardiovascular e infertilidad masculina.
Además, algunos estudios han sugerido una posible asociación entre el uso prolongado de andrógenos y un mayor riesgo de cáncer prostático. Por lo tanto, es esencial que los pacientes sigan las recomendaciones médicas y eviten tomar dosis más altas o durante períodos más largos que los prescritos.
En resumen, los derivados del androstano son una clase importante de hormonas sexuales masculinas utilizadas para tratar diversas condiciones médicas. Sin embargo, su uso debe ser supervisado cuidadosamente por un médico y los pacientes deben estar conscientes de los posibles efectos secundarios y riesgos asociados con el abuso crónico.