La desmopresina es un fármaco que pertenece al grupo ATC H01BA02 y se utiliza para tratar la diabetes insípida, enuresis nocturna y la prevención de hemorragias en pacientes con enfermedad de Von Willebrand.
En España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en el año 2019 se dispensaron más de 300.000 unidades de desmopresina en diferentes presentaciones farmacéuticas como comprimidos, solución nasal y solución inyectable.
La desmopresina actúa como un análogo sintético de la hormona antidiurética (ADH), que regula la cantidad de agua reabsorbida por los riñones. En pacientes con diabetes insípida, el cuerpo no produce suficiente ADH, lo que provoca una excreción excesiva de agua a través de la orina. La desmopresina ayuda a reducir esta excreción al aumentar la reabsorción renal del agua.
En el caso de la enuresis nocturna (incontinencia urinaria durante el sueño), se cree que la desmopresina ayuda a reducir la producción nocturna de orina al disminuir el flujo sanguíneo renal y aumentar su concentración.
En cuanto a su uso en pacientes con enfermedad de Von Willebrand, se ha demostrado que la administración intranasal o subcutánea antes de una intervención quirúrgica reduce significativamente el riesgo de hemorragias perioperatorias.
La dosis recomendada varía según cada paciente y su condición médica específica. En general, para tratar la diabetes insípida, se recomienda una dosis inicial de 0.05-0.1 mg al día, que puede aumentarse gradualmente según la respuesta del paciente. Para la enuresis nocturna, se recomienda una dosis de 0.2-0.4 mg antes de acostarse.
Es importante tener en cuenta que la desmopresina puede causar efectos secundarios como dolor de cabeza, náuseas y vómitos, hiponatremia (bajo nivel de sodio en sangre) y retención urinaria. Por lo tanto, es fundamental que los pacientes informen a su médico si experimentan algún síntoma inusual durante el tratamiento.
En conclusión, la desmopresina es un fármaco útil para tratar diversas condiciones médicas relacionadas con la regulación del agua en el cuerpo humano. Siempre debe ser prescrita por un médico y administrada bajo supervisión médica para minimizar los riesgos asociados con su uso.