Ficha técnica - METFORMINA AUROVITAS 850 mg COMPRIMIDOS RECUBIERTOS CON PELICULA EFG
1. NOMBRE DEL MEDICAMENTO
Metformina Aurovitas 850 mg comprimidos recubiertos con película EFG
2. COMPOSICIÓN CUALITATIVA Y CUANTITATIVA
Cada comprimido recubierto con película contiene 850 mg de hidrocloruro de metformina equivalentes a 663 mg de metformina.
Para consultar la lista completa de excipientes, ver sección 6.1.
3. FORMA FARMACÉUTICA
Comprimido recubierto con película.
Comprimidos recubiertos con película, , de color blanco, biconvexos, de forma ovalada, con una ranura separando las marcas “I” y “92” en una cara.
4. DATOS CLÍNICOS
4.1. Indicaciones terapéuticas
Tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2, especialmente en pacientes con sobrepeso, cuando la dieta prescrita y el ejercicio por sí solos no sean suficientes para un control glucémico adecuado.
En adultos, el hidrocloruro de metformina puede utilizarse en monoterapia o en combinación con otros antidiabéticos orales, o con insulina.
En niños a partir de 10 años de edad y adolescentes, el hidrocloruro de metformina puede utilizarse en monoterapia o en combinación con insulina.
Se ha demostrado una reducción de las complicaciones de la diabetes en pacientes adultos con diabetes tipo 2 y sobrepeso en tratamiento con hidrocloruro de metformina como tratamiento de primera línea tras el fracaso de la dieta (ver sección 5.1).
4.2. Posología y forma de administración
Posología
Adultos con función renal normal (TFG ≥ 90 ml/min)
Monoterapia y combinación con otros antidiabéticos orales:
- La dosis inicial normal es un comprimido de 500 mg u 850 mg de hidrocloruro de metformina 2 ó 3 veces al día junto con o después de las comidas.
- Al cabo de 10 o 15 días, la posología se debe ajustar en función de los niveles de glucosa en sangre. Un incremento paulatino de la dosis puede mejorar la tolerabilidad gastrointestinal.
- La dosis máxima diaria recomendada de hidrocloruro de metformina es de 3 g repartidos en 3 tomas.
Si se pretende cambiar a partir de otro antidiabético oral, debe dejar de tomarse éste e iniciar el tratamiento con hidrocloruro de metformina con las dosis indicadas anteriormente.
Combinación con insulina:
El hidrocloruro de metformina y la insulina pueden utilizarse en combinación para lograr un mejor control glucémico. La dosis inicial habitual de 500 mg de hidrocloruro de metformina o bien 850 mg de hidrocloruro de metformina se administra 2 ó 3 veces al día, ajustando la dosis de insulina según los niveles de glucosa en sangre.
Pacientes de edad avanzada
Debido a la posible reducción de la función renal en personas de edad avanzada, la posología de metformina debe ajustarse según la función renal. Es necesaria una evaluación regular de la función renal (ver sección 4.4).
Insuficiencia renal
Se debe evaluar la TFG antes de iniciar el tratamiento con productos que contengan metformina y, al menos, una vez al año a partir de entonces. En pacientes expuestos a un mayor riesgo de posprogresión de la insuficiencia renal y en pacientes de edad avanzada, se debe evaluar la función renal con mayor frecuencia, p. ej., cada 3–6 meses.
TFG ml/min | Dosis diaria máxima total (a dividir en 2–3 dosis diarias) | Consideraciones adicionales |
60–89 | 3.000 mg | Se puede considerar la reducción de la dosis en relación al deterioro de la función renal. |
45–59 | 2.000 mg | Se deben revisar los factores que puedan incrementar el riesgo de acidosis láctica (ver sección 4.4) antes de considerar el inicio con metformina. La dosis inicial es, a lo sumo, la mitad de la dosis máxima. |
30–44 | 1.000 mg | |
< 30 | - | Metformina está contraindicada. |
Población pediátrica
Monoterapia y combinación con insulina:
- Metformina puede administrarse a niños a partir de 10 años de edad y adolescentes.
- La dosis inicial habitual es de 500 mg o de 850 mg de hidrocloruro de metformina una vez al día, junto con o después de las comidas.
Después de 10–15 días de tratamiento, se debe ajustar la dosis en función de los niveles de glucosa en sangre. Un incremento paulatino de la dosis, puede mejorar la tolerabilidad gastrointestinal.
La dosis máxima recomendada de hidrocloruro de metformina es de 2 g diarios, repartidos en 2 ó 3 tomas.
4.3. Contraindicaciones
- Hipersensibilidad al hidrocloruro de metformina o a alguno de los excipientes, incluidos en la sección 6.1.
- Cualquier tipo de acidosis metabólica aguda (como acidosis láctica, cetoacidosis diabética).
- Precoma diabético.
- Insuficiencia renal grave (TFG < 30 ml/min).
- Trastornos agudos que puedan alterar la función renal como:
-
- deshidratación,
- infección grave,
- shock.
- Enfermedad aguda o crónica capaz de provocar una hipoxia tisular, como:
-
- insuficiencia cardiaca o respiratoria,
- infarto de miocardio reciente,
- shock.
- Insuficiencia hepática, intoxicación alcohólica aguda, alcoholismo.
4.4. Advertencias y precauciones especiales de empleo
Acidosis láctica:
La acidosis láctica es una complicación metabólica muy rara, pero grave que se produce con mayor frecuencia durante el empeoramiento agudo de la función renal, en caso de enfermedad cardiorrespiratoria o septicemia. La acumulación de metformina se produce durante el empeoramiento agudo de la función renal e incrementa el riesgo de acidosis láctica.
En caso de deshidratación (diarrea o vómitos intensos, fiebre o reducción de la ingesta de líquidos), la metformina se debe interrumpir de forma temporal y se recomienda contactar con un profesional sanitario.
Los medicamentos que puedan alterar de manera aguda la función renal (como antihipertensivos, diuréticos y AINEs) se deben iniciar con precaución en los pacientes tratados con metformina. Otros factores de riesgo para la acidosis láctica son el consumo excesivo de alcohol, la insuficiencia hepática, la diabetes mal controlada, la cetosis, el ayuno prolongado y cualquier proceso asociado a hipoxia, así como el uso concomitante de medicamentos que puedan causar acidosis láctica (ver secciones 4.3 y 4.5).
Se debe informar a los pacientes o a los cuidadores acerca del riesgo de acidosis láctica. La acidosis láctica se caracteriza por disnea acidótica, dolor abdominal, calambres musculares, astenia e hipotermia, seguidos de coma. En caso de que se sospeche de la presencia de síntomas, el paciente debe dejar de tomar metformina y buscar atención médica inmediata. Los hallazgos diagnósticos de laboratorio son una disminución del pH sanguíneo (<7,35), niveles de lactato plasmático aumentados (>5 mmol/l) y un aumento del desequilibrio aniónico y del cociente lactato/piruvato.
Función renal:
Se debe evaluar la TFG antes de iniciar el tratamiento y, de forma regular a partir de entonces, ver sección 4.2. La metformina está contraindicada en pacientes con TFG < 30 ml/min y se debe
interrumpir de forma temporal en presencia de trastornos que alteren la función renal, ver sección 4.3.
Función cardiaca:
Los pacientes con insuficiencia cardiaca tienen más riesgo de sufrir hipoxia e insuficiencia renal. En pacientes con insuficiencia cardiaca crónica estable, la metformina puede ser usada con una monitorización regular de la función cardiaca y renal.
En pacientes con insuficiencia cardiaca inestable y aguda, la metformina está contraindicada (ver sección 4.3).
Administración de medios de contraste yodados:
La administración intravascular de medios de contraste yodados puede provocar nefropatía inducida por el contraste, que puede ocasionar la acumulación de metformina y puede aumentar el riesgo de acidosis láctica. Por tanto, la administración de metformina se debe interrumpir antes o en el momento de la prueba y no se debe reanudar hasta pasadas al menos 48 horas, siempre que se haya reevaluado la función renal y comprobado que es estable, ver secciones 4.2 y 4.5.
Cirugía:
La metformina se debe suspender en el momento de la cirugía con anestesia general, espinal o epidural. El tratamiento se puede reanudar pasadas 48 horas desde la cirugía o tras la reanudación de la nutrición oral, siempre que se haya reevaluado la función renal y comprobado que es estable.
Población pediátrica:
El diagnóstico de diabetes mellitus tipo 2 debe ser confirmado antes de iniciar el tratamiento con hidrocloruro de metformina.
No se han descrito efectos del hidrocloruro de metformina sobre el crecimiento o la pubertad, en los ensayos clínicos controlados de un año de duración, pero no se dispone de datos a largo plazo al respecto. Por consiguiente, se recomienda realizar un seguimiento riguroso de los parámetros correspondientes en los niños en tratamiento con hidrocloruro de metformina, especialmente antes de la pubertad.
Niños entre 10 y 12 años de edad:
En los ensayos clínicos controlados llevados a cabo en niños y adolescentes, solamente se incluyeron 15 individuos con edades comprendidas entre 10 y 12 años. Aunque la eficacia y seguridad del hidrocloruro de metformina en estos niños no difiere de la observada en niños mayores de 12 años y adolescentes, se recomienda especial precaución al prescribirla a niños con edades comprendidas entre 10 y 12 años.
Otras precauciones:
– Todos los pacientes deben continuar con su dieta con una distribución regular de la ingesta de carbohidratos durante el día. Los pacientes con sobrepeso deben continuar con su dieta hipocalórica.
– Deben realizarse regularmente las pruebas de laboratorio habituales para el control de la diabetes.
– La metformina en monoterapia no produce por sí sola hipoglucemia; no obstante, se recomienda tener precaución cuando se administra en asociación con insulina u otros antidiabéticos orales (por ejemplo, sulfonilureas o meglitinidas).
4.5. Interacción con otros medicamentos y otras formas de interacción
Uso concomitante no recomendado:
Alcohol
La intoxicación alcohólica está asociada con un mayor riesgo de acidosis láctica, especialmente en caso de ayuno, desnutrición o insuficiencia hepática.
Medios de contraste yodados
La administración de metformina se debe interrumpir antes o en el momento de la prueba y no se debe reanudar hasta pasadas al menos 48 horas, siempre que se haya reevaluado la función renal y comprobado que es estable, ver secciones 4.2 y 4.4.
Combinaciones que requieren precauciones de empleo:
Algunos medicamentos pueden afectar de forma adversa la función renal, lo que puede incrementar el riesgo de acidosis láctica, p. ej., los AINEs, incluidos los inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa (COX) II, los inhibidores de la ECA, los antagonistas del receptor de la angiotensina II y los diuréticos, en especial, los diuréticos del asa. Cuando se inicien o se utilicen estos productos en combinación con metformina, es necesario supervisar de manera estrecha la función renal.
Medicamentos con actividad hiperglucémica intrínseca (ej., glucocorticoides (vía sistémica y local) y simpaticomiméticos):
Se debe realizar un seguimiento más riguroso de la glucemia, especialmente al principio del tratamiento. Si es necesario, ajustar la posología de metformina durante el tratamiento con el correspondiente medicamento y tras su suspensión.
Transportadores de cationes orgánicos (OCT)
La metformina es sustrato de los transportadores OCT1 y OCT2.
La co-administración de metformina con:
- Inhibidores de OCT1 (como verapamilo) puede reducir la eficacia de metformina.
- Inductores de OCT1 (como rifampicina) puede incrementar la absorción gastrointestinal y la eficacia de la metformina.
- Inhibidores de OCT2 (como cimetidina, dolutegravir, ranolazina, trimetoprim, vandetanib, isavuconazol) puede disminuir la eliminación de metformina y esto puede provocar un aumento de la concentración plasmática de metformina.
- Inhibidore de OCT1 y OCT2 (como crizotinib, olaparib) puede alterar la eficacia y la eliminación renal de metformina.
Por lo tanto, se recomienda precaución, especialmente en pacientes con insuficiencia renal, cuando estos medicamentos se administran conjuntamente con metformina, ya que la concentración plasmática de metformina puede aumentar. Si es necesario, puede considerarse un ajuste de dosis de metformina, ya que los inhibidores/inductores de OCT pueden alterar la eficacia de metformina.
4.6. Fertilidad, embarazo y lactancia
Embarazo
La diabetes incontrolada durante el embarazo (gestacional o permanente) está asociada con el incremento del riesgo de anomalías congénitas y mortalidad perinatal.
Existen datos limitados del uso de metformina en mujeres embarazadas, que no indican un incremento del riesgo de anomalías congénitas. Los estudios en animales no indican efectos perjudiciales en el embarazo, desarrollo embrionario y fetal, el parto o el desarrollo postnatal (ver sección 5.3).
Cuando la paciente diabética planee un embarazo y durante su transcurso, no se debe tratar la diabetes con hidrocloruro de metformina, sino que debe utilizarse insulina para mantener los niveles de glucosa en sangre lo más cercanos posible al intervalo normal y así reducir el riesgo de malformaciones fetales relacionadas con glucemias alteradas.
Lactancia
El hidrocloruro de metformina se excreta en la leche materna. No se han observado efectos adversos en los recién nacidos/bebés con lactancia materna. Sin embargo, dado que la información disponible es limitada, la lactancia materna no se recomienda durante el tratamiento con metformina. La decisión de retirar la lactancia materna debe tomarse teniendo en cuenta los beneficios de la lactancia y el riesgo potencial de los efectos adversos en el niño.
Fertilidad
La fertilidad en ratas hembras o machos no se vio afectada por la metformina cuando se administró en dosis tan altas como 600 mg/kg/día, lo que representa aproximadamente 3 veces la dosis máxima diaria recomendada en humanos basándose en la comparación de la superficie corporal.
4.7. Efectos sobre la capacidad para conducir y utilizar máquinas
El hidrocloruro de metformina en monoterapia no produce hipoglucemia y por tanto no produce ningún efecto en la capacidad para conducir o utilizar máquinas.
No obstante, se debe advertir al paciente de los riesgos de aparición de hipoglucemia cuando el hidrocloruro de metformina se utiliza en combinación con otros antidiabéticos (p.ej.,sulfonilureas, insulina y meglitinidas).
4.8. Reacciones adversas
Durante el inicio del tratamiento, las reacciones adversas más frecuentes son náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal o pérdida de apetito, que se resuelven espontáneamente en la mayoría de los casos. Para prevenirlos, se recomienda tomar metformina en 2 ó 3 tomas al día e incrementar la dosis lentamente.
Durante el tratamiento con hidrocloruro de metformina pueden ocurrir las siguientes reacciones adversas. Las frecuencias se definen de la siguiente forma: muy frecuentes ≥1/10; frecuentes ≥ 1/100, <1/10; poco frecuentes ≥1/1.000, <1/100; raras ≥1/10.000, <1/1.000; muy raras <1/10.000 y frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles).
Las reacciones adversas se enumeran en orden decreciente de gravedad dentro de cada intervalo de frecuencia.
Trastornos del metabolismo y nutrición:
Muy raras:
- Acidosis láctica (ver sección 4.4).
- El uso de metformina durante periodos largos reduce la absorción y los niveles en suero de la vitamina B12. Se recomienda considerar esta etiología en pacientes que presenten anemia megaloblástica.
Trastornos del sistema nervioso:
Frecuentes: alteración del gusto.
Trastornos gastrointestinales:
Muy frecuentes: trastornos gastrointestinales como náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal y pérdida de apetito. Estos trastornos aparecen con mayor frecuencia durante el inicio del tratamiento y se resuelven espontáneamente en la mayoría de los casos. Para prevenirlos, se recomienda tomar el hidrocloruro de metformina repartido en 2 ó 3 dosis diarias, durante o después de las comidas. Un lento incremento de la dosis puede también mejorar la tolerabilidad gastrointestinal.
Trastornos hepatobiliares:
Muy raras: se han descrito casos aislados de alteración en las pruebas de función hepática o bien hepatitis, que se resuelven tras la discontinuación del tratamiento con hidrocloruro de metformina.
Trastornos de la piel y del tejido subcutáneo:
Muy raras: reacciones cutáneas tales como eritema, prurito, urticaria.
Población pediátrica
En los datos publicados, datos poscomercialización y en los ensayos clínicos controlados realizados en un número limitado de pacientes pediátricos con edades comprendidas entre 10–16 años tratados durante un año, las reacciones adversas notificadas fueron similares en naturaleza y gravedad a las notificadas en adultos.
Notificación de sospechas de reacciones adversas:
Es importante notificar sospechas de reacciones adversas al medicamento tras su autorización. Ello permite una supervisión continuada de la relación beneficio/riesgo del medicamento. Se invita a los profesionales sanitarios a notificar las sospechas de reacciones adversas a través del Sistema Español de Farmacovigilancia de medicamentos de Uso Humano: https://www.notificaram.es.
4.9. Sobredosis
No se han notificado casos de hipoglucemia con dosis de hidrocloruro de metformina de hasta 85 g, aunque en estas condiciones sí se ha producido acidosis láctica. Una gran sobredosis de metformina o riesgos concomitantes pueden desembocar en acidosis láctica. La acidosis láctica es una urgencia médica que debe ser tratada a nivel hospitalario. El método más eficaz para eliminar el lactato y el hidrocloruro de metformina en el organismo es la hemodiálisis.
5. PROPIEDADES FARMACOLÓGICAS
5.1. Propiedades farmacodinámicas
Grupo farmacoterapéutico: Fármacos hipoglucemiantes excluyendo insulinas: biguanidas. Código ATC: A10BA02.
Mecanismo de acción
El hidrocloruro de metformina es una biguanida con efectos anti-hiperglucémicos, que reduce los niveles plasmáticos de glucosa basales y post-prandiales. No estimula la secreción de insulina, por lo que no produce hipoglucemia.
El hidrocloruro de metformina actúa por medio de 3 mecanismos:
- Reducción de la producción hepática de glucosa mediante la inhibición de la gluconeogénesis y la glucogenolisis.
- En el músculo, incrementando la sensibilidad a la insulina, mejorando la captación periférica de glucosa y su utilización.
- Retraso de la absorción intestinal de la glucosa.
El hidrocloruro de metformina estimula la síntesis intracelular del glucógeno, actuando sobre la glucógeno sintetasa.
El hidrocloruro de metformina incrementa la capacidad de transporte de todos los tipos de transportadores de membrana de glucosa (GLUT) conocidos hasta hoy.
Efectos farmacodinámicos
En estudios clínicos, el uso de metformina se asoció a un mantenimiento del peso corporal o una ligera disminución del mismo.
En humanos, independientemente de su acción sobre la glucemia, el hidrocloruro de metformina presenta efectos favorables sobre el metabolismo lipídico. Este hecho se ha demostrado con dosis terapéuticas en ensayos clínicos controlados a medio o largo plazo: el hidrocloruro de metformina reduce los niveles de colesterol total, el colesterol LDL y los niveles de triglicéridos.
Eficacia clínica
En un ensayo prospectivo aleatorizado (UKPDS) se ha establecido el beneficio a largo plazo del control intensivo de la glucemia en pacientes adultos con diabetes tipo 2.
El análisis de los resultados en pacientes con sobrepeso tratados con hidrocloruro de metformina tras el fracaso del régimen dietético solo, mostró:
- una reducción significativa del riesgo absoluto de cualquier complicación relacionada con la diabetes en el grupo de hidrocloruro de metformina (29,8 casos/ 1.000 pacientes-año) frente al grupo con sólo dieta (43,3 casos/ 1.000 pacientes-año), p=0,0023; y frente a los grupos de sulfonilureas combinadas y monoterapia de insulina (40,1 casos/ 1.000 pacientes-año), p=0,0034.
- una reducción significativa del riesgo absoluto de mortalidad relacionada con la diabetes en el grupo de hidrocloruro de metformina (7,5 casos/1.000 pacientes-año) en comparación con el grupo con sólo dieta,(12,7 casos/ 1.000 pacientes-año), p=0,017.
- una reducción significativa del riesgo absoluto de mortalidad global en el grupo de hidrocloruro de metformina (13,5 casos/ 1.000 pacientes-año), frente al grupo con dieta sola (20,6 sucesos/ 1.000 pacientes-año) p=0,011; y frente a los grupos de sulfonilureas combinadas y monoterapia de insulina (18,9 casos/ 1.000 pacientes-año) p=0,021.
- una reducción significativa del riesgo absoluto de infarto de miocardio en el grupo hidrocloruro de metformina (11 casos/ 1.000 pacientes-año) frente al grupo con sólo dieta (18 casos/ 1.000 pacientes-año) p=0,01.
No se ha demostrado un beneficio en cuanto al resultado clínico con metformina en combinación con una sulfonilurea como terapia de segunda línea.
En diabetes del tipo 1, se ha utilizado la combinación de hidrocloruro de metformina e insulina en pacientes seleccionados, pero no se han establecido formalmente el beneficio clínico de esta combinación.
Población pediátrica
Los ensayos clínicos controlados en un número limitado de pacientes pediátricos de entre 10 y 16 años tratados con hidrocloruro de metformina durante un año, mostraron una respuesta similar a la observada en adultos en cuanto al control glucémico.
5.2. Propiedades farmacocinéticas
Absorción
Tras la administración por vía oral de una dosis de hidrocloruro de metformina, el tiempo hasta alcanzar la concentración plasmática máxima (Cmáx) es 2,5 horas (tmáx). La biodisponibilidad absoluta de un comprimido recubierto de 500 u 850 mg de hidrocloruro de metformina es aproximadamente del 50 al 60 % en sujetos sanos. Tras una dosis oral, la fracción no absorbida recuperada en las heces fue del 20–30 %.
Tras la administración oral, la absorción del hidrocloruro de metformina es saturable e incompleta. Esto sugiere que la farmacocinética de la absorción del hidrocloruro de metformina es no lineal.
Con las dosis recomendadas y la posología habitual del hidrocloruro de metformina las concentraciones plasmáticas en estado estacionario se alcanzan en un periodo de 24 a 48 horas y generalmente son inferiores a 1 µg/ml. En los ensayos clínicos controlados, los niveles plasmáticos máximos de hidrocloruro de metformina (Cmáx) no exceden los 5 µg/ml, incluso con dosis máximas.
Los alimentos reducen y retrasan ligeramente la absorción de metformina. Tras la administración oral de un comprimido de 850 mg, se observó una disminución de la concentración plasmática máxima (Cmáx) del 40 %, una disminución del 25 % del AUC (área bajo la curva) y una prolongación de 35 minutos en el tiempo (tmáx) hasta alcanzar el pico de concentración plasmática. No se conoce la relevancia clínica de estos hallazgos.
Distribución
La fijación a las proteínas plasmáticas es insignificante. El hidrocloruro de metformina se distribuye dentro de los eritrocitos. El pico de las concentraciones sanguíneas es menor que el de las plasmáticas y aparece aproximadamente al mismo tiempo. Los eritrocitos representan probablemente un compartimento secundario de distribución. El volumen de distribución medio (Vd) osciló entre 63 y 276 litros.
Metabolismo
El hidrocloruro de metformina se excreta inalterado en la orina. En humanos no se ha identificado ningún metabolito.
Eliminación
El aclaramiento renal del hidrocloruro de metformina es > 400 ml/min, lo que indica que el hidrocloruro de metformina se elimina por filtración glomerular y por secreción tubular. Tras una dosis oral, la semivida de eliminación total es de aproximadamente 6,5 horas
En caso de que la función renal esté alterada, el aclaramiento renal disminuye proporcionalmente al de la creatinina, con lo que se prolonga la vida media de eliminación, conduciendo a un aumento de los niveles de hidrocloruro de metformina en plasma.
Características en grupos específicos de pacientes
Insuficiencia renal
Los datos disponibles en pacientes con insuficiencia renal moderada son escasos y no se podría hacer una estimación fiable de la exposición sistémica a la metformina en este subgrupo en comparación con sujetos con función renal normal. Por lo tanto, el ajuste de dosis debe hacerse en base a consideraciones de eficacia / tolerabilidad clínica (ver sección 4.2).
Población pediátrica
Ensayo de dosis única: tras una dosis única de 500 mg de hidrocloruro de metformina, los pacientes pediátricos mostraron un perfil farmacocinético similar al observado en adultos sanos.
Ensayo de dosis múltiples: la información está limitada a un estudio. Tras la administración de dosis repetidas de 500 mg, dos veces al día durante 7 días en pacientes pediátricos, la concentración plasmática máxima (Cmáx) y la exposición sistémica (AUC0-t) se redujeron aproximadamente en un 33% y un 40% respectivamente en comparación con los pacientes diabéticos adultos que recibieron dosis repetidas de 500 mg, dos veces al día durante 14 días. Dado que la dosis se ajusta individualmente según un control glucémico, este hecho posee una relevancia clínica limitada.
5.3. Datos preclínicos sobre seguridad
Los datos de estudios preclínicos no muestran riesgos especiales para los seres humanos según los estudios convencionales de seguridad, farmacología, toxicidad a dosis repetidas, genotoxicidad, potencial carcinogénico y toxicidad en la reproducción.
6. DATOS FARMACÉUTICOS
6.1. Lista de excipientes
Núcleo del comprimido:
Povidona
Estearato de magnesio
Recubrimiento:
Hipromelosa
Macrogol
6.2. Incompatibilidades
No aplicable.
6.3. Periodo de validez
4 años.
6.4. Precauciones especiales de conservación
Este medicamento no requiere condiciones especiales de conservación.
6.5. Naturaleza y contenido del envase
Metformina Aurovitas comprimidos recubiertos con película está disponible en envases tipo blíster de PVC/PVdC/aluminio y PVC – lámina de aluminio, conteniendo cada blíster 10 comprimidos recubiertos con película.
Tamaños de envase: 50 y 500 (envase clínico) comprimidos recubiertos con película.
.
6.6. Precauciones especiales de eliminación y otras manipulaciones
La eliminación del medicamento no utilizado y de todos los materiales que hayan estado en contacto con él, se realizará de acuerdo con la normativa local.
7. TITULAR DE LA AUTORIZACIÓN DE COMERCIALIZACIÓN
Aurovitas Spain, S.A.U.
Avda. de Burgos, 16-D
28036 Madrid
España
8. NÚMERO(S) DE AUTORIZACIÓN DE COMERCIALIZACIÓN
74.969
9. FECHA DE LA PRIMERA AUTORIZACIÓN/ RENOVACIÓN DE LA AUTORIZACIÓN
Fecha de la primera autorización: Noviembre 2011
Fecha de la última renovación: Marzo 2016