El grupo ATC N07C comprende los medicamentos utilizados para tratar el vértigo, una afección que se caracteriza por una sensación de giro o movimiento del entorno, incluso cuando el cuerpo está en reposo. Los medicamentos contra el vértigo actúan sobre el sistema nervioso central para reducir la intensidad y la frecuencia de los episodios de vértigo.
En España, se estima que alrededor del 20% de la población experimenta vértigo en algún momento de su vida. El vértigo puede ser causado por diversas afecciones, como enfermedades del oído interno, lesiones cerebrales o trastornos neurológicos. Además, algunos medicamentos pueden provocar efectos secundarios que incluyen mareo y vértigo.
Los medicamentos más comunes utilizados para tratar el vértigo pertenecen al grupo ATC N07C. Estos incluyen antagonistas del receptor H1 de histamina, como la betahistina y la cinnarizina. La betahistina actúa aumentando el flujo sanguíneo en el oído interno y mejorando así su función. La cinnarizina también mejora la circulación sanguínea en el oído interno y tiene un efecto sedante sobre el sistema nervioso central.
Otro tipo de medicamento utilizado para tratar el vértigo son los anticolinérgicos, como la escopolamina. Estos fármacos actúan bloqueando los receptores muscarínicos en el cerebro y reduciendo así las señales nerviosas que causan mareo y náuseas.
Además de estos medicamentos específicos para el vértigo, también se pueden utilizar otros fármacos para tratar los síntomas asociados, como las náuseas y los vómitos. Los antieméticos, como la metoclopramida y el ondansetrón, son útiles en estos casos.
Es importante destacar que algunos medicamentos pueden provocar efectos secundarios que incluyen mareo y vértigo. Por lo tanto, es fundamental que los pacientes informen a su médico sobre cualquier medicamento que estén tomando antes de comenzar un tratamiento para el vértigo.
En resumen, el grupo ATC N07C comprende los medicamentos utilizados para tratar el vértigo. Estos fármacos actúan sobre el sistema nervioso central para reducir la intensidad y la frecuencia de los episodios de vértigo. En España, alrededor del 20% de la población experimenta vértigo en algún momento de su vida. Los medicamentos más comunes utilizados para tratar el vértigo incluyen antagonistas del receptor H1 de histamina y anticolinérgicos. Además, se pueden utilizar otros fármacos para tratar los síntomas asociados, como las náuseas y los vómitos. Es fundamental informar al médico sobre cualquier medicamento que se esté tomando antes de comenzar un tratamiento para el vértigo debido a posibles efectos secundarios relacionados con mareo o vértigo.