El grupo ATC R05D incluye los antitusivos, que son medicamentos utilizados para tratar la tos. Estos medicamentos actúan sobre el centro de la tos en el cerebro y reducen la frecuencia y la intensidad de la tos.
En España, los antitusivos están disponibles en diferentes formas farmacéuticas, como jarabes, comprimidos y cápsulas. Algunos de los antitusivos más comunes incluyen dextrometorfano, codeína y butamirato.
Según las estadísticas disponibles para España, se ha observado un aumento en el consumo de antitusivos en los últimos años. En 2019, se vendieron más de 2 millones de unidades de antitusivos solo en farmacias españolas.
Es importante tener en cuenta que no todos los tipos de tos deben ser tratados con antitusivos. La tos es un mecanismo natural del cuerpo para eliminar las secreciones o cuerpos extraños del sistema respiratorio. Por lo tanto, si la tos es productiva (con expectoración), no se recomienda el uso de antitusivos ya que pueden dificultar la eliminación del moco.
Además, algunos grupos poblacionales como niños menores de 6 años y personas con enfermedades respiratorias crónicas deben evitar el uso innecesario o prolongado de antitusivos debido a posibles efectos secundarios como somnolencia o depresión respiratoria.
En cuanto a las interacciones medicamentosas, es importante tener precaución al combinar ciertos tipos de antitusivos con otros medicamentos que también actúan sobre el sistema nervioso central (como sedantes o tranquilizantes). Esto puede aumentar el riesgo de efectos secundarios como somnolencia o mareos.
En resumen, los antitusivos son medicamentos útiles para tratar la tos, pero deben ser utilizados con precaución y solo cuando sea necesario. Es importante seguir las recomendaciones del médico o farmacéutico en cuanto a la dosis y duración del tratamiento. Además, se debe tener en cuenta que no todos los tipos de tos deben ser tratados con antitusivos y que algunos grupos poblacionales deben evitar su uso innecesario o prolongado.